¿Cómo es la política en Cataluña?

La independencia de Cataluña

Tres años después del intento fallido de su gobierno de declarar unilateralmente la independencia, Cataluña ha desaparecido de los titulares internacionales. Aunque es improbable que sus instituciones supongan nuevas amenazas serias para la estabilidad de España, la situación política en la región autónoma está lejos de normalizarse: Varios políticos independentistas están actualmente en la cárcel o en el exilio (buscados por la justicia española), las protestas violentas estallan regularmente en las calles y la “guerra de banderas” continúa en los balcones de los pueblos y ciudades de Cataluña.

“Las elecciones han consolidado la política de bloques. Los ciudadanos votan en función de su identidad nacional, por lo que será muy difícil que el nuevo gobierno traspase esas líneas”, explica a Equal Times Lluís Orriols, profesor de Ciencia Política de la Universidad Carlos III de Madrid.

Han pasado varias semanas desde las elecciones y la formación de un gobierno estable sigue siendo una tarea difícil. “Las negociaciones entre los partidos independentistas serán largas y complicadas, sobre todo porque uno de ellos, la CUP, no se mueve por los mecanismos tradicionales de poder. Pero al final llegarán a un acuerdo. Ya hay precedentes”, añade.

Parlamento de Cataluña

Conservadores de Cataluña (catalán: Conservadors de Catalunya, CiC) fue un partido político español de ámbito catalán dirigido por Juan Parra Balcells -candidato independiente al Senado de España en las elecciones generales de 1977 y que había sido uno de los fundadores del Partido Democrático Progresista-[2] y Santiago Brutau Cirera, que actuaba como vicepresidente del partido. Se registró oficialmente ante el Ministerio del Interior español el 30 de enero de 1980[1].

Fue un partido conservador, nacionalista y liberal, que se presentó a las elecciones del Parlamento de Cataluña en 1980 y obtuvo 4095 votos (0,15% de votos)[3] También se presentó a las elecciones generales de 1982, donde obtuvo 2596 votos.

Elecciones en Cataluña

No debe confundirse con el Consejo Ejecutivo de Cataluña, el poder ejecutivo de la Generalitat, que también se denomina “Gobierno de Cataluña” debido a la traducción literal de la palabra catalana govern. Tampoco debe confundirse con la institución equivalente y homónima del País Valenciano, la Generalitat Valenciana.

Sus orígenes se sitúan en el siglo XIII cuando se crearon consejos permanentes de diputados (diputaciones) para regir la administración de las Cortes de los distintos reinos que formaban la Corona de Aragón que dieron lugar a la Diputación del General del Principado de Cataluña (1359), la Diputación del General del Reino de Aragón (1362) y la Diputación del General del Reino de Valencia (1412). La Generalitat moderna se estableció en 1931, como institución de autogobierno de Cataluña dentro de la República Española. Permaneció en el exilio tras el final de la Guerra Civil en 1939, y fue restablecida en 1977.

La Generalitat de Cataluña tiene su origen en las Cortes Catalanas, ya que durante el reinado de Jaime I el Conquistador (1208-1276) se reunieron y fueron convocadas por el rey, como representantes de los planteamientos sociales de la época. Bajo el reinado de Pedro el Grande (1276-1285), las Cortes Catalanas adquirieron carácter institucional, después de que el rey se obligara a celebrar una “Corte General” anual. Las Cortes Catalanas ejercían como Consejo y tenían funciones legislativas a través de sus tres ramas (braços): la eclesiástica (clero), la militar (nobleza) y la popular (pueblos y ciudades sometidos al gobierno directo del rey). Esta unión de las ramas se denominó “Lo General de Cathalunya”, donde “General” significa la comunidad política de los catalanes en su conjunto.

Convergencia y unión

Las profundas divergencias entre ERC, JxCat y la Candidatura de Unidad Popular (CUP), de extrema izquierda, habían provocado pocos avances hasta la semana pasada. El plazo para formar un nuevo gobierno expiraba el 26 de mayo.

“El objetivo no es otro que servir al ‘país’ [la comunidad autónoma española de Cataluña] y a la gente de la mejor manera posible, gobernar para todos y al mismo tiempo poder avanzar hacia el objetivo común de la independencia en forma de República Catalana”, escribieron ERC y JxCat en un comunicado conjunto.

El Gobierno español, una coalición formada por el partido socialista PSOE y el izquierdista Unidos Podemos, expresó su preocupación por el acuerdo entre ERC y JxCat, pero subrayó su compromiso de negociar con el nuevo ejecutivo catalán.